LOCKE 1632-1704

Retrato de John Locke. Herman Verelst. 1670-90? National Portrait Gallery Londres

Locke nació en 1632 y su vida transcurrió en una época de profunda agitación política en Inglaterra por el antagonismo entre liberales (Whigs), partidarios de una monarquía parlamentaria, y conservadores (Tories) partidarios del absolutismo de los Estuardo.  Cuando Locke tenía 10 años en 1642 se produce en Inglaterra un enfrentamiento entre el Parlamento y el rey absolutista Carlos I. Este enfrentamiento conducirá a la revolución de 1648 dirigida por Cromwell que finalizará con la ejecución del rey Carlos I.

En el año 1651, Hobbes publica su obra Leviatán y Locke ingresa en 1652 en la Universidad de Oxford, donde la filosofía más extendida era el escolasticismo aristotélico decadente. Sin embargo, la nueva filosofía experimental se iba abriendo paso gracias a John Wilkins. El grupo de Wilkins será el origen de la Royal Society. Con la restauración de Carlos II, John Wilkins abandonó Oxford convirtiéndose en el nuevo líder del grupo científico oxoniano Robert Boyle. Locke leyó a Boyle y más tarde le conoció personalmente. En este tiempo leyó también a Descartes que le hizo recobrar el optimismo filosófico mostrándole que es posible un pensamiento filosófico claro y ordenado. Pero, aunque su admiración por Descartes le hizo adoptar su método, sin embargo, su contacto con la filosofía experimental de Oxford le proporcionó una perspectiva desde la que criticar el racionalismo de la filosofía cartesiana.

En 1666 Locke trabó amistad con Lord Ashley (más tarde conde de Shaftesbury bajo el reinado de Carlos II). En 1667 abandonó Londres para convertirse en su médico personal, secretario, consejero político, amigo personal y también en tutor de su hijo. En 1668, ocupó, por mediación de Shaftesbury, el cargo de secretario de la Cámara de Comercio y se implicó en la redacción de la constitución de las Carolinas, en la que defendía la esclavitud en el artículo 110. Además, se sabe que el propio Locke invirtió en el comercio de esclavos una suma entre 400 y 600 libras, existe cierta confusión al respecto, en la Royal African Company.

 En invierno de 1671, Locke mantiene en su habitación de Exeter House discusiones filosóficas, que darán origen a su obra fundamental, el Ensayo sobre el conocimiento humano. Obra que fue escribiendo en sus exilios políticos (1683, 1685) en Francia y Holanda, en donde concluyó su redacción. Durante su estancia en Francia mantuvo contactos con cartesianos y anticartesianos y recibió la influencia de Gassendi.

Después de la caída de Cromwell, Jacobo II (hermano de Carlos I) sube al trono en 1685 e intenta gobernar de nuevo de forma absolutista, lo que provocará en 1688 la Revolución Gloriosa. Jacobo II huye a Francia. Sube al trono Maria Estuardo a la que acompaña Locke desde Holanda a Inglaterra y su marido Guillermo de Orange que instaura una monarquía parlamentaria como reacción al absolutismo de los Estuardo restableciendo las funciones del Parlamento. A partir de ahora las luchas políticas se centrarán entre los Tories (conservadores partidarios de los Estuardos y el absolutismo) y los Whigs (liberales partidarios de los Orange y el parlamentarismo). Por otra parte, los conflictos religiosos en Inglaterra están protagonizados por anglicanos, protestantes, católicos y calvinistas con resultados violentos la mayoría de las veces. "Acta de tolerancia" (1689), suponía, la libertad religiosa, que se concedía a los grupos protestantes, pero de la que fueron excluidos no obstante los católicos. A este respecto, Carta sobre la Tolerancia (1685) de Locke publicada en Holanda se muestra igualmente intolerante con los católicos y los ateos a quienes considera intolerantes por no admitir el derecho de otras religiones.

Tras su regreso a Inglaterra, Locke contacta con Newton del que había leído sus Principia Mathemathica Philosophia Naturalis. En 1690 publicó el Ensayo, y los dos Tratados del Gobierno Civil (1690) El primero tenía un carácter polémico y trataba de refutar las doctrinas de Robert Filmer sobre la legitimidad de las monarquías basadas en el “derecho divino” de los reyes. El Segundo Tratado sobre el Gobierno civil es considerado como la justificación teórica de la revolución liberal del 1688. Su trascendencia política ha sido crucial en el desarrollo de la historia europea y norteamericana por su rechazo de toda forma de absolutismo y su defensa de un poder descentralizado en tres poderes separados.       

En 1700 se retiró de la actividad pública. Murió en octubre de 1704.

En cuanto al clima filosófico, el cartesianismo es la filosofía imperante en el continente, consiguiendo hacer pasar a un segundo término el escolasticismo. El mismo Locke mantiene con el racionalismo cartesiano una relación ambivalente: por una parte, sostiene que la experiencia es el límite del conocimiento, siendo considerado el padre del empirismo moderno, por otra parte, sostiene la evidencia intuitiva del yo y la posibilidad de un conocimiento demostrativo de Dios, aunque polemiza contra Leibniz en lo concerniente a las ideas innatas. Frente al racionalismo, la filosofía natural de Newton, se va imponiendo como modelo de la nueva ciencia basada en la experimentación y la matematización. También Newton disputa contra Leibniz en lo relativo a la autoría del cálculo diferencial. Frente al racionalismo, el empirismo se caracterizará por:

  1. a) Preocupación gnoseológica, moral y política.
  2. b) Reconocimiento de los límites de la razón, y valoración de los sentidos como fuente de conocimiento.
  3. c) Negación de la existencia de ideas innatas.
  4. d) Rechazo de la metafísica.
  5. e) Objetivismo o realismo.
  6. f) Confianza en el método inductivo

En Europa se impone el arte Barroco en todos los ámbitos, aunque Inglaterra, debido a su carácter isleño, no desarrolla intensamente esta corriente, no obstante, dadas sus relaciones con Holanda, los aristócratas se hacen retratar por Van Dick, por ejemplo. La pintura inglesa cultiva el género costumbrista. En literatura, El Paraíso Perdido de Milton, es la obra más importante de la segunda mitad de siglo en Inglaterra.

Para finalizar, decir que la trascendencia del pensamiento de Locke es obvia: considerado el primer filósofo empirista moderno; el padre del liberalismo político; inspirador de la Independencia americana y de la Revolución Francesa del S XVIII.